Éxito total del concierto de Ángel Rielo en Madrid a favor de la Fundación Irene Villa
Casi dos horas de espectáculo llenas de risas, bailes, emoción y mucha alegría en la presentación del disco «gracias»
El concierto solidario que ofreció Ángel Rielo en Madrid para presentar su disco «Gracias» a favor de la Fundación Irene Villa ha sido todo un éxito. Una noche mágica llena de buenos momentos para recordar. El público que llenaba el Teatro Magno de la capital cantó, bailó y pasó un rato más que divertido con el espectáculo que ofreció Ángel Rielo para presentar su disco.

Eran casi las diez de la noche cuando Emilio González, «Emiliogon», que ejercía de maestro de ceremonias, irrumpía lleno de energía en el escenario para dar comienzo a la fiesta. Palabras de agradecimiento, saludos, una buenas dosis de humor y una llamada a Irene Villa para acompañarle sobre el escenario. Irene, feliz de ver tantas caras conocidas y amigos cercanos, agradeció de corazón a todos su presencia y habló durante unos minutos de la Fundación y su vocación de servir a los demás. Tras los aplausos y la invitación a pasar una gran velada todos juntos, las luces y la música dieron paso al espectáculo de Ángel Rielo.
Casi dos horas de música y diversión en los que el artista y humorista ha ido presentando los diferentes temas de su disco «Gracias». Canciones hechas con mucho corazón para los diferentes espectáculos que ha realizado y que ahora, por primera vez, reúne en este disco solidario bajo el título de «Gracias». Junto a él, su compañero en mil batallas, el músico Fidel Cordero, y todo el grupo de magníficos músicos que le suelen acompañar sobre el escenario.
Momentos mágicos
Fue una noche muy especial, con humor, chistes, buena música y algunos momentos que nos emocionaron. Sin duda uno de ellos fue la actuación de la cantante Merche, que junto al propio Rielo interpretó un par de temas antes de regalar a los asistentes alguna de sus canciones más emblemáticas. Otro de esos instantes especiales lo regaló la bailaora Celeste Cerezo, que llenó el escenario de duende acompañando con sus castañuelas y la potencia de su baile una de las canciones más conocidas de Ángel Rielo. Martilda ilusionista nos trajo su magia y nos regaló su sonrisa contagiosa mientras realizaba alguno de sus trucos de magia entre los aplausos del público.

Pero sin duda, el momento mágico de la noche se produjo cuando Irene Villa, que había estado coreando y bailando todas las canciones desde el fondo de la sala, subió al escenario. Rielo le dedicó una canción compuesta especialmente para ella y para este concierto. Sobre las tablas del escenario del Teatro Magno, iluminados solamente con una luz azulada, Ángel Rielo e Irene se fundieron en un abrazo al terminar la ocasión. Fueron momentos de emoción, de alegría y de agradecimiento.
Entonces se dio paso al gran final de fiesta. El público, que durante casi dos horas había bailado y cantado también se acercó al escenario. Todos juntos cantaron el tema «Gracias» que da nombre al disco solidario que se presentaba esa noche y que se convirtió casi en el himno de la noche. como el propio Ángel comentaba poco después de bajarse del escenario fue un «sueño cumplido y amor repartido. Algo mágico que no fue mío, sino de todas las almas bonitas que había en el escenario, en el backstage, en el teatro y en el corazón».
Una inyección de energía y ánimo que nos dejó con las baterías más que recargadas.
¡Sólo podemos decir, «Gracias»!
Todavía está a tiempo de ayudar haciendo un Bizum al número de la Fundación Irene Villa 04521